La muerte de dos mujeres en Vigo y Santiago a manos de hombres con los que habían mantenido una relación sentimental cierra un fin de semana negro en Galicia y eleva el número de víctimas de la violencia machista en la Comunidad a dos —cuatro más están en investigación— en lo que va de año.
La primera de las fallecidas fue hallada muerta en la madrugada del sábado en el portal de la casa que compartía con dos amigas en Vigo. Los investigadores creen que el autor de la decena de puñaladas que recibó en cuello y pecho es un compañero de trabajo con el que mantuvo una relación sentimental esporádica y que este domingo fue detenido en el hospital.
Según fuentes policiales informaron a ABC, esta persona trató de autolesionarse antes de su arresto y después de que los agentes inspeccionasen el domicilio en el que vive con sus padres. Las heridas que se autoinfligió no revistieron gravedad, por lo que a lo largo de la jornada de este lunes se espera su paso a disposición judicial.
Coincidieron en la cena
Acerca de la calificación como crimen machista, fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) informaron que al cierre de esta edición aún no se había determinado si se trata de un caso de violencia de género o no, pese a que todas las evidencias así lo indican. La muchacha fallecida tenía 25 años y llevaba varios meses trabajando en la empresa donde conoció al supuesto agresor, una filial de Citroën a la que se incorporó nada más cabar sus estudios con brillantes calificaciones. La noche del trágico suceso asistió a la cena de empresa, en la que también estuvo presente el detenido. Unas compañeras la dejaron delante de su portal, donde se cree que el presunto agresor la sorprendió con un arma que aún no ha sido localizada y la acuchilló hasta la muerte.
Las primeras informaciones apuntan a que ambos mantuvieron una breve relación que la fallecida rompió para volver con su actual pareja. Algunos testigos también afirmaron que después de la cena el arrestado se ofreció a llevar a la joven a casa, pero ella declinó su oferta y se fue con dos amigas. Los análisis iniciales a los que fue sometido el cadáver de la muchacha no revelaron rastro alguno de que se hubiese cometido una agresión sexual.
Los agentes también descartan el móvil económico ya que la cartera de la víctima estaba intacta y de la escena en crimen solo falta su teléfono móvil. A espera de que el detenido sea puesto a disposición del juez, fuentes policiales sostienen que el ataque fue brutal y que varios vecinos llegaron a oír los gritos de la víctima, que forcejeó con su agresor tal y como demuestra que la pulsera de su reloj estuviese partida.
Apuñalada en Santiago
A mediodía de este domingo también se conocía la muerte de una joven de nacionalidad rumana de 30 años que fue apuñalada el pasado viernes en un céntrico piso de la capital gallega. La víctima presentaba seis incisiones por arma blanca en el abdomen y estaba tendida en el salón de la casa, de la que el agresor huyó antes de que la Policía y los servicios médicos llegasen. Inmediatamente se inició una búsqueda por las inmediaciones del lugar, pero el sospechoso seguía fugado al cierre de esta edición.
Su pareja llegó al hospital todavía consciente, pero no pudo reponerse de la intervención a la que fue sometida por la gravedad de las heridas ocasionadas. El crimen fue presenciado por una compañera de trabajo de la fallecida que en ese momento estaba también en la vivienda. El hombre, que se dio a la fuga, estaba pasando una temporada en la vivienda de la víctima porque no tenía dónde quedarse.
FUENTE: ABC