Un trabajador que intervenía en las labores de extinción del incendio forestal registrado ayer en Almansa (Albacete) falleció después de sufrir un accidente el helicóptero que pilotaba, cuando se dirigía a la localidad próxima de Alpera para aprovisionarse de agua.
El fuego fue detectado por un vigilante fijo sobre las dos del mediodía, cerca del paraje denominado Barranco de la Mosca, situado a un par de kilómetros de la población murciana de Yecla, zona que posee una amplia superficie de arbolado en donde predomina la especie de pino carrasco (pinus halepensis) y monte bajo.
Debido a esa ubicación efectivos antiincendios de la Comunidad de Murcia se sumaron a las labores de extinción de las llamas, que habían afectado a más de 300 hectáreas de arbolado al cierre de esta edición.
El fatal accidente tuvo lugar a las 19 horas en la finca Casa La Panda, a unos dos kilómetros del casco urbano de Alpera, según confirmó a este diario la regidora de esta población y vicepresidenta de la Cortes de Castilla-La Mancha, Cesárea Arnedo.
La alcaldesa desveló que el piloto fallecido, que responde a las iniciales F.F.B., nacido en 1969, era natural de Murcia y estaba destinado en el Destacamento Contra Incendios de Villahermosa (Ciudad Real).
A la espera de la llegada de los servicios judiciales al lugar del siniestro, Arnedo también precisó que el fuego «estaba prácticamente controlado hacia las 22 horas y la superficie afectada por las llamas oscila entre las 300 y 400 hectáreas».
Según informaron desde el Servicio de Incendios Forestales dependiente de la Consejería deAgricultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en las labores de extinción trabajaron cerca de 300 efectivos, en concreto 42 de personal interno; dos medios de dirección y coordinación, con siete personas; 17 medios aéreos, con 27 personas; y 51 medios de extinción terrestres con otros 211 operarios.
En el momento de cerrar esta edición continuaban trabajando en la extinción del fuego un total de 173 personas y 39 medio terrestres, ya que los medios aéreos habían regresado a sus bases de operaciones debido a la falta de visibilidad. Durante toda la noche permaneció un retén en la zona para supervisar los trabajos de un incendio que estaba «estabilizado».
Debido a las llamas y a la intensa humareda, la carretera que comunica Almansa y Yecla tuvo que ser cortada (CM 3220), a la altura de Montealegre del Castillo, y la RM 426 en Yecla.
Según pudo saber ayer este diario, los especialistas barajan la posibilidad de que el fuego se originase por un rayo latente, dándose la circunstancia de que hace unos días se produjo otro pequeño incendio en esa zona.
Fuente: Tribuna de Toledo.