La madre del pequeño acudió a los juzgados de guardia para solicitar el permiso de enterramiento
Un parto en casa sin asistencia profesional devenido en tragedia. El Juzgado número 5 de Vigo investiga la muerte de un bebé el pasado lunes en una vivienda de la ciudad después de que ingresase en el Hospital Álvaro Cunqueiro. El personal de Urgencias trató de reanimarlo, pero no pudieron evitar el fallecimiento del pequeño.
El juzgado en el que se intruye la investigación espera ahora el informe preliminar con los resultados de la autopsia realizada al recién nacido este martes. Una vez se conzocan las causas del fallecimiento el magistrado podría determinar posibles responsabilidades penales respecto a la muerte del bebé.
De acuerdo con fuentes consultadas por este periódico, la investigación judicial se inició el pasado lunes después de que la propia madre acudiese a los juzgados de guardia para solicitar el permiso de enterramiento del bebé fallecido durante el parto. Fue entonces, después de preguntarle las causas de la muerte, cuando la mujer explicó las circunstancias en las que había tenido el bebé.
Por el momento, no hay no hay ninguna denuncia contra ella y se ha determinado la prohibición de incinerar los restos del bebé fallecido por si fuera necesario realizar nuevas pruebas forenses.
¿ES SEGURO PARIR EN CASA?
La trágica muerte de este bebé en Vigo ha reactivado el debate sobre la seguridad de llevar a cabo un parto en casa, una práctica poco extendida en Galicia y en España, pero más común en países como Reino Unido u Holanda y que es una «elección personal» de cada mujer. Se calcula que una treintena de gallegas se decantan por esta opción cada año. El coste de la asistencia y del parto a domicilio suponen entre 1.500 y 2.000 euros. En Galicia incluso menos de 1.500. Y no todas las madres que quieren, acceden.
Pero, ¿es seguro? En general, ginecólogos consultados se muestran en contra de los partos en casa como estrategia sanitaria. «Hay mucha gente que habla de este tema pero con el corazón; puede que nos hayamos pasado por exceso de medicalización, pero hace 30 años se nos morían muchas mujeres en el parto y hoy no», asegura el ginecólogo Javier Valdés.
FUENTE: La Opinión Coruña